Margarita Goldflam, se convierte en nueva graduada de nuestro Magíster en Historia


Luego de dos años de realizar defensas de tesis de forma remota, a través de Zoom, nuestro programa de Magíster en Historia, realizó recientemente su primera defensa presencial de la Tesis de Margarita Goldflam Leiva,La salud materna en Chile, 1973-1990”, investigación que estuvo bajo la dirección de las profesoras Ximena Illanes y Brandi Townsend.

 

La Comisión de profesores estuvo integrada por:

Dra. Ximena Illanes
Directora de Tesis
(P. Universidad Católica de Chile)

Dra. Brandi Townsend
Directora de Tesis
(P. Universidad Católica de Chile)
 

Dra. María Soledad Zárate
Profesora Informante Externa
(Universidad Alberto Hurtado)
 

Dr. Manuel Gárate
Profesor Informante Interno
(P. Universidad Católica de Chile)

 


Resumen de Tesis


La pregunta que inspiró esta investigación radica en cómo aconteció el embarazo, el alumbramiento y el post parto, en el contexto de la Dictadura Militar chilena (1973-1990), donde se produjeron transformaciones profundas en el ámbito de la salud, pero también se manifestaron ciertas continuidades con gobiernos anteriores. Por lo tanto, el principal objetivo de la tesis es analizar la política de la salud materna en la Dictadura. Con el fin de responder esto se definieron los siguientes objetivos específicos. Primero describir la salud materna antes del Régimen para reconocer permanencias y cambios que se produjeron con la Dictadura. En seguida, conocer la visión de las mujeres y las autoridades del Régimen acerca de la maternidad, para de esta forma observar el mecanismo en que se concretaron las políticas sanitarias. Luego explorar el impacto de la reforma a la salud hacia las prestaciones asociadas a la maternidad en el sistema público y privado. Dado que en los setenta y ochenta se popularizaron importantes progresos científicos y tecnológicos como la cesárea, es necesario recabar la penetración de dichos instrumentos en la obstetricia nacional. Además, enunciar los planes nutricionales dirigidos a las embarazadas y madres lactantes, ya que son parte esencial de la salud materna. Asimismo, reflexionar en torno a la lactancia y exponer la postura del gobierno sobre su promoción. Finalmente, realizar un balance de la política en salud materna en función de indicadores numéricos, pero también del testimonio de las usuarias. De este modo, tener una perspectiva más acabada de lo que fue la salud materna en Dictadura. Clave para poder resolver estas interrogantes son las impresiones que se vertieron en la época por las autoridades estatales, los profesionales sanitarios y las mujeres que ingresaron a las maternidades. Dichas temáticas se abordaron históricamente desde una perspectiva de género y de la salud pública.

A partir de lo anterior, se sostiene que la Dictadura reemplazó el Estado de Bienestar por un nuevo sistema de tipo neoliberal. Al mismo tiempo, el gobierno consideraba que el lugar de la mujer en la sociedad se definía por su rol de madre, lo cual implicaba una visión biológica y determinista del género, que estuvo amparada en el discurso y algunas políticas sanitarias. Sin embargo, hubo una paradoja en el Régimen, ya que se presentaron contradicciones en la defensa del maternalismo en la salud, pues las mujeres en las ISAPRES fueron discriminadas por su mayor siniestralidad asociada principalmente a la posibilidad de embarazarse, lo que implicaba un mayor costo. Por otro lado, en el sistema público, las prestaciones asociadas a la maternidad no representaban para las afiliadas de FONASA desembolsos adicionales en la cotización. Con todo, hubo una importante incorporación de progresos científicos y tecnológicos en la obstetricia nacional que se evidencian en el alza sostenida de las cesáreas en el sistema privado y público, incluso pudiendo constatarse un supuesto peligro de haber sobre utilizado estos avances en desmedro de un embarazo y nacimiento más natural. Mientras que otras políticas como la nutrición fueron continuadoras de medidas anteriores que se mantuvieron y hasta se perfeccionaron, asimismo, se siguió promoviendo la lactancia materna por los beneficios para el binomio madre-hijo. En líneas generales, la Dictadura preservó la salud materna y optimizó los índices manteniendo las mejoras que ocurrían desde gobiernos predecesores. Ahora bien, en lo novedoso de sus reformas como las ISAPRES, quedaron flancos que no se condecían con su mensaje ni su compromiso con la salud materna, e incluso a partir del relato de las usuarias se manifestaba que todavía permanecían serios desafíos para una mejor atención.