Leonor Riesco, recibe Premio Miguel Cruchaga Tocornal, por su tesis doctoral


Nuestra egresada del programa de Doctorado en Historia, Leonor Riesco, ha recibido el Premio Miguel Cruchaga Tocornal 2020, concedido por la Academia Chilena de la Historia, por su tesis doctoral "¡Ay Javiera que dolores! Conflicto y escándalo en una familia de elite, 1852-1889", realizada bajo la dirección del profesor Rafael Sagredo.

La Academia Chilena de la Historia adoptó la decisión el 14 de diciembre pasado, en su última sesión ordinaria anual,  luego de oír la recomendación del Comité Evaluador del Premio. Este señaló que se trata de “un trabajo sólidamente elaborado, con un fino  análisis de las fuentes y prudencia en las conclusiones en un tema particularmente complejo, como es todo lo vinculado con la historia de las mentalidades”. Se destaca asimismo la calidad literaria de la autora y el magnífico aprovechamiento de la documentación del archivo de Francisco Echaurren.

La Academia entrega el Premio desde 1956 como una forma de promover la redacción de la mejor tesis universitaria en el país sobre un tema de historia.

 

Resumen de tesis doctoral:

“¡Ay Javiera, qué dolores! conflicto y escándalo en una familia de elite, 1859-1889”

La presente investigación tuvo como propósito central estudiar la administración del conflicto y el escándalo entre los sujetos de la elite chilena en la segunda mitad del siglo XIX, así como los distintos mecanismos y estrategias que utilizaron y los ajustes que debieron hacer entre sus intereses personales y los patrones conductuales imperantes.

Una de las principales hipótesis del trabajo es que la misma colectividad que erigió, preservó y transmitió un modelo de conducta que juzgó correcto e idóneo, censurando a quienes no se ajustaran a él, en la práctica muchas veces constató que éste era inviable o incompatible con los intereses y conductas individuales de los llamados a respetarlo. Enfrentados a esta contradicción intrínseca entre el "ser" y las normas del "deber ser — las dos consignas esenciales presentes a lo largo de esta tesis los individuos debieron someter su criterio y calcular si ceder a lo primero, circunscribirse a lo segundo o transar entre ambos. A partir de ese diálogo y transitando por los espacios de lo íntimo, lo privado y lo público, nuestro objetivo fue esclarecer el particular modo en que los sujetos de la elite se concibieron a sí mismos y a su entorno, el valor que depositaron en la opinión pública, la necesidad de proyectar una imagen ceñida a las expectativas de sus pares y los costos de mantenerla.

Todo esto se ejemplifica con elocuencia a través de la familia Eyzaguirre Echaurren, sobre todo en los reveses acaecidos a lo largo de su historia y las decisiones que fue tomando para enfrentarlos. Su correspondencia privada da cuenta del modo en que se autorrepresentaron sus integrantes y el nivel de gravitación que tuvo para ellos el juicio social, al mismo tiempo que devela ciertos condicionantes socioculturales de la mentalidad y el comportamiento de su colectividad, en particular cuando los individuos se vieron sometidos a situaciones de conflicto o escándalo.

Conocer a fondo la historia de esta atribulada familia de elite desde la óptica de Javiera Echaurren García Huidobro, permite sostener que detrás de las apariencias de estabilidad y homogeneidad, el grupo social del cual formó parte estuvo compuesto por múltiples singularidades; y que basta con adentrarse un poco más en la vida privada de sus integrantes para constatar que ni los roles según el género fueron tan definidos, ni las normas conductuales tan esmeradamente observadas.