El Colegio de México acaba de lanzar una segunda edición revisada y ampliada del libro Historia mínima de Chile, volumen que ahora incluye dos nuevos apartados que abordan hechos como el estallido social, los frustrados procesos constituyentes y la elección de Gabriel Boric, además de otras temáticas más estructurales, como la desigualdad y la desconfianza en las instituciones.

Ya con más de una década desde su publicación, Historia Mínima de Chile —del Premio Nacional de Historia y académico del Instituto de Historia UC, Rafael Sagredo Baeza —, acaba de tener una segunda edición revisada y ampliada.
De acuerdo con el historiador, esta publicación se hacía necesaria “para incorporar la visión histórica de lo ocurrido en los últimos años: la década del 2014-2024 es una década de transformaciones expresadas en diversos fenómenos que muestran una sociedad expectante, ansiosa y frustrada, la cual vive la incertidumbre de los tiempos de diversas formas. Pero en definitiva en democracia, lo que a la luz de experiencias históricas anteriores resulta un gran mérito”.
En concreto, la nueva edición de Historia mínima de Chile suma dos nuevos apartados: “Tiempos de incertidumbre y ansiedad” y una adenda bibliográfica que se suma al cuerpo del volumen.
El primer apartado aborda la historia de Chile de los últimos 10 a 15 años, es decir desde 2010-2024 a la actualidad, ofreciendo una interpretación tanto de proceso coyunturales como estructurales, como el estallido social, los procesos constituyentes y la elección de Gabriel Boric.
Así como también da cabida a “problemas estructurales como la desigualdad, la desconfianza en las instituciones, la sensación de inseguridad y la creciente frustración de la ciudadanía que estimulan soluciones populistas y, en sintonía con lo que ocurre en otras latitudes, fortalecen a la extrema derecha”, asegura Sagredo.
Mientras que en el segundo apartado extra de la nueva edición, “se ofrece una relación de los temas que han preocupado a la historiografía sobre Chile producida de 2014 en adelante. Es una enumeración que ratifica la ampliación de lo considerado histórico en Chile, multiplica los actores y sujetos objeto de la historia y, también, muestra lo contingente de una historiografía que también se ocupa, estudiando el pasado, de los desafíos de nuestra contemporaneidad”, agrega el historiador.

El Chile que viene
Respecto a las posibilidades de ampliar o profundizar los temas abordados en esta edición, el académico asegura que esta edición, por el momento, “actualiza las posibilidades de comprender nuestra trayectoria histórica al incorporar algunos de los hechos y procesos ocurridos y que se desenvuelven desde 2010 en adelante”.
Y sobre temas que podrían marcar un análisis futuro, Sagredo puntualizó que “quedará ocuparse de la evolución y consecuencias de uno de los índices elocuentes que hemos señalado como reflejo de estos tiempos de ansiedad e insatisfacción, como lo es la dramática baja de la natalidad, que ha transformado la posibilidad de criar en otro marcador de la incertidumbre y desigualdad que caracteriza nuestra sociedad”.